Parque Natural del Cañón del Río Lobos

El Parque Natural del Cañón del Río Lobos está compuesto por un profundo cañón calizo formado por una antigua e intensa erosión fluvial del río Lobos y el entorno que lo rodea con frondosos bosques de pinos y sabinas. 

El Cañón del Río Lobos se sitúa en las sierras de pie de monte que separan las estribaciones de la Cordillera Ibérica y la alta meseta del Duero. 

El río Lobos nace en Burgos y se encajona y continúa horadando las calizas cretácicas en Soria recorriendo más de 25 km.

Este espacio natural del Cañón del Río Lobos fue declarado Parque Natural en 1985 y comprende una superficie de 9580 has. 

La formación más espectacular es el propio Cañón fruto de la doble acción erosiva, de desgaste y, sobre todo, de disolución de la roca por el agua, siendo más vivo el hundimiento del lecho al ceder las grutas subterráneas, por lo que aparecen las típicas zonas cóncavas o lermas en los flancos del cañón, que además son muy vistosas por los teñidos de óxidos y aguas que escurren.

Hay dos rutas para hacer a pié:

1.- La ruta mas popular es la que parte de la entrada al Cañón del Río Lobos por Ucero. Se deja el coche en el aparcamiento de acceso y hay un camino fácil y sin pendientes pronunciadas hasta la ermita templaria de San Bartolomé. Es un paseo muy agradable y es obligado hacer una foto a la ermita desde la imponente cueva que se sitúa a sus espaldas. Antes de llegar a Ucero es de obligatoria parada el mirador de La Galiana desde el que se divisa una vista espectacular del cañón.

2.- La ruta más larga es la que parte del puente de los siete ojos en Santa María de las Ollas. Recorre la mayor parte del cañón y también termina en la ermita aunque por el otro lado. En poca de lluvias cuando el río está crecido será necesario vadearlo en algunos puntos.